RAPIDEZ EN SU EJECUCIÓN. Se solapan tiempos de construcción, con un acortamiento de plazos de entre el 30% y el 60%, dependiendo de la complejidad de la construcción.

Es decir, La construcción modular facilita el solape de las actividades constructivas, que en la tradicional serían imposibles por tener éstas un desarrollo cronológico lineal, no pudiéndose empezar una fase hasta que no se ha completado la anterior. Por ejemplo, no se pueden colocar pilares si antes no se han ejecutado las zapatas.

Esta posibilitad de simultanear la ejecución de diferentes actividades (por ejemplo: se puede ir adecuando la parcela a la vez que ya se construye en fábrica), junto con la mayor rapidez en la fabricación industrial, que no se ve sujeta a condiciones climáticas ni otras interferencias externas, hace que el tiempo medio de ejecución sea de 3 meses, cuando en la tradicional es de entre 12 a 24 meses.

ECONOMÍA. Al ser un procedimiento industrializado, se economizan costes, llegando a ahorros de entre el 50% y el 30%, dependiendo de la complejidad de la construcción.

MAYOR CALIDAD. El control de calidad en fábrica es mucho más exigente que en la construcción tradicional in situ. Los edificios modulares se construyen con las mismas normativas y especificaciones arquitectónicas que la construcción tradicional, con la gran diferencia de que la construcción modular, al realizar los procesos constructivos industrializados, consigue poder garantizar el cumplimiento de los procedimientos exigidos en los diferentes sellos de calidad con los que cuentan nuestros edificios, y que la construcción tradicional no garantiza.

MÁS ECOLÓGICA. Ofrece más respeto al medio ambiente. Todos los materiales utilizados en la construcción modular son reaprovechables, por lo que no se generan residuos contaminantes en su fabricación y montaje. La construcción modular al ser un proceso industrializado de fabricación, optimiza la utilización de materiales, tanto en su cantidad como en la gestión de los residuos generados.

REUBICACIÓN Y REUTILIZACIÓN. Los edificios modulares son reutilizables. Estos pueden ser desmontados y trasladados a una nueva ubicación, siendo sus materiales re-aprovechados en un 95%, lo que les hace aun más ecológicos y económicos.

Es un servicio que se le da al cliente que incluye, desde el diseño del edificio modular adecuado al terreno disponible y a las necesidades que marque el cliente, pasando por la fabricación, montaje y puesta en uso del edificio, para su entrega listo para su disfrute

Al tratarse de un sistema de construcción, los tipos de aislamientos y acabados pueden ser cualquiera que elija el cliente.

Actualmente, nuestros edificios modulares más avanzados cumplen con el Código Técnico de Edificación, en todos los requisitos de aislamiento acústico, térmico, resistencia al fuego, etc. lo que hace que nuestras construcciones sean aptas para cualquier fin.

Todas nuestras estructuras tienen marcado CE y cumplen los sellos de calidad ISO 9001 e ISO 14001.

La cobertura y plazos de garantías para los módulos individuales y conjuntos modulares es de 1 año desde la entrega, comprendiendo: estanqueidad, estructuras y defectos ocultos de fabricación

Para las instalaciones y servicios el plazo es también de un año desde la finalización del montaje, comprendiendo instalación eléctrica, fontanería, aires/acondicionado, instalación de voz y datos o cualquier instalación aceptada en el contrato de compraventa.

Para los aires/acondicionados, termos o cualquier otro material no fabricado en nuestra fábrica, Azopardo prestará un servicio post-venta durante 2 años desde la fecha de la entrega.

El mal uso, la manipulación indebida o el deterioro debido por agentes externos como cal, productos nocivos, obstrusivos (canalones cubierta) o corrosivos, así como un mantenimiento inadecuado o anomalías en la acometida eléctrica, de fontanería o mala ejecución del asentamiento de los módulos, dejan sin vigencia las garantías mencionadas.

Para responder a esta pregunta lo más acertado es empezar por saber de que presupuesto se dispone. Al tratarse de un sistema de construcción su precio final dependerá de la calidad de los materiales que se elijan, de las dimensiones del edificio y de la situación previa del terreno donde se va a instalar.